lunes, 15 de marzo de 2010

Distopía

No existe nada, como la identidad abolida.
Reconocerse en carteles que,
después de ayer,
son sólo abadía:
la deconstrucción, la distopía.

No existe nada como ver, un dia
-velo que se corre, nuevo telón que se da-,
la absurda idiotez
de nuestro poder analítico;
del componer estamentos,
ridículos,
y marcharle una plegaria
a la razón.
Ausente: pasión.

No existe nada como no hacer nada,
y andarse, con las manos arriba,
los hombros al son,
respondiendo -ya no a quién-
sólo al viento,
¿y ahora qué?

No existe nada, como reconocer,
que entre la teoría y la realidad,
surca un niño, un niño anciano,
de rojos ojos y estrás,
que se llama vida:
Vida Real.

21 comentarios:

Marina Agra dijo...

Gracias, Lea.

marichuy dijo...

Marina,

Es bello y duro, al mismo tiempo; el último verso:

"no existe nada, como reconocer,
que entre la teoría y la realidad,
surca un niño, un niño anciano,
de rojos ojos y estrás,
que se llama vida:
Vida Real"

me recordó un film de mis quereres: "Children of men".

Nada como ver unos ojos, infantiles o avejentados, desprovistos de todo rastro de esperanza, para darse un sentón de realismo... nada mágico.

Un beso

El viento a contramano dijo...

“Velo que se corre, nuevo telón que se da...” así funciona cada día de nuestras vidas. No existen segundos capítulos, todo es siempre una nueva historia.
El tiempo es un espacio infinito, donde nuestras minúsculas vidas transcurren... algunas serán más extensas que otras, pero pocas serán más intensas.
La tuya, Maru, respira intensidad y vive a partir de ella… eso te vuelve diferente.

Besos, che…

p/d: me hiciste poner rojo de vergüenza, jaaa :P

El viento a contramano dijo...

me olvidaba, el "apuntes de hoy" es perfecto... lo poco que leí de Alejandra Pizarnik me ha parecido muy bello, siempre.

:)

Muma dijo...

Y un día vemos lo que no veíamos... the dark side of the moon... y advertimos lo limitado de las categorías analíticas que creíamos superpoderosas, la total inutilidad de haber ofrendado certezas a la razón... y nos desconocemos, para reconocernos otros, los que somos, atrapados entre la teoría y la realidad, un niño anciano de ojos rojos y estrás, mucho estrás.
Me encanto!!!
Besos

Darío dijo...

Un poema crudo, no? Como un tango que recuerdo de Goyeneche: "Cruel en el cartel, la propaganda manda cruel, en el cartel..."
La miseria de poder identificarnos sólo a partir de imposiciones del mercado.
Y además, algo tan duro que nos ocurre, y que tan bien se argumentó en los comentarios precedentes. Saber que toda nuestra estructura racional se desmorona ante la evidencia. Como encontrarnos desnudos y ridículos ante un público que se ríe. Un abrazo.

Iván dijo...

Marina: Bravo, bárbara, linda pero por sobre todas las cosas, melancólica.
Me da la sensación que sos una mujer solitaria de permanente companía, no encuentro otra explicación a todo lo que escribís.
Besos.

Mariana dijo...

buenisimo

Estrella dijo...

Me gustó mucho, Marina.
Cuando el velo se corre, la absurda idiotez...

Mafalda dijo...

...

Auchhh...

Semanas a atrás pude liberarme de muchas cosas, necesité un susto fuerte para lograr extender mis alas y volar aún más alto de lo que lo hacía años, meses,días lejanos.

La realidad es cruda, no tengo duda de eso.

En los días de mi juventud la meta era la felicidad.
En estos días de mi madurez, caminaré por senderos de felicidad, aunque sean caminitos cortos...dirigiéndome hacia la meta...

Te mando abrazete...

Mafalda

Silvia dijo...

Te pasas horas, días, años levantando un castillo de naipes. Cuando ganas algo de confianza te atreves a gozar de tus habilidosas manos, de tu paciencia, de tu sagacidad, primero con precaución: temerosa, luego te animas a gritarlo a los cuatro vientos. Un día, cuando vas por la carta número 35 del maso número 28, te decís: Qué carajo es todo esto? Para que mierda me sirve? Que sentido tiene?
Con un manotón intentás borrar años de estupidez en segundos. Y funciona. Comprobás que funciona a la perfección, nada queda ya en pie, pero también comprobás que no hay nada que festejar: cualquier plan de aquí en más ya no será nunca más lo mismo.

Silvia dijo...

Afortunadamente, tras la distopía y del ¿Ahora qué? algunas veces podemos encontrar Arte: maravillosas palabras Marina.

Marina Agra dijo...

marichuy, gran resumen: realismo no mágico. un beso, nena.

Hola, Lea, vos te merecés dedicatorias, cuanto menos, porque con tus soplidos me despertás cuando empiezo a dormir, y no me quiero dormir. Beso grande!

Gracias, Muma, siempre me gusta lo que interpretás. Un beso, nena.

Pulgarcito, sabe que el otro día a partir de su post fui hasta la biblioteca a hojear a la Tía Julia y el Escribidor y, definitivamente, volvió a parecerme -en tan sólo unos pasajes- de lo mejor, mejor. Quería contarte. Gracias por pasarte cada vez! Un beso!

Hola, Iván. No sé bien cómo soy, depende de la circunstancia, supongo. Igual, just a poem! Un beso grande!

Mariana :)

Marina Agra dijo...

Estrella, gracias, nena!

Hola, Mafis, supongo que será que tendemos a quedarnos dormidos. Me alegro de que tus alas estén abiertas, me alegro por tu camino!

Ah, Silvia, bravo para vos! Tal vez sea mejor sólo elegir una carta, y hacerla jugar! El arte es tuyo, pues!

Señor Mayor dijo...

creo que casi por primera vez (mira lo que te digo) estoy de acuerdo con vos de entre algunas cosas que pude sacar en limpioque tampoco fueron tantas

asique mientras tanto yo te insistire con que comas mas milanesas con pure, mas de mis hamburguesas caseras con perejil y si sonreis con los ojos como sabes hacer, ya esta: vida real.

te quiero pendejita

Marina Agra dijo...

Me acabo de comer unos fideos con morrón y cebolla y crema y mil cosas más que no se qué eran y de postre un súper chocolate, querido hedonista. ¿Tenés hamburguesas en serio? Mmm, qué rico. :)

Gracias, también te quiero!

Anónimo dijo...

si nenita tengo hamburguesas y me salen cada vez mejor.

Noesperesnada dijo...

Te leo y me da un poco de vértigo...

julián dijo...

Bien Marina. eso es dar pelea "vida real". Que interès, que potencia tiene la palbra "descontrucciòn", me gusta.

Elio Puntieri dijo...

Mi querida Marina... usted sí que pretende complicarme a vida.


Muy bueno. Un beso. Saludos, desde el cartel.

*** dijo...

Esto, esta muy bueno, Marina.
Bien, muy bien.
La distopía la hija concreta de la utopía.
Es muy valiente, meterse con ella.
Nadie quiere nombrarla.
Salud!